14 de julio de 2011

Editorial 17 - Julio 2011

Ahora más que nunca



El resultado de la elección del domingo último en la Ciudad requiere de un análisis profundo y meditado, porque claramente han habido elementos que no se tuvieron en cuenta a la hora de caracterizar la relación entre el gobierno de Macri y la sociedad porteña. Casi el 50% de la sociedad porteña evalúa bien la gestión de Macri, o por lo menos decidió acompañarlo en las elecciones. Por eso, debemos hacer una evaluación seria de cuáles fueron los errores cometidos durante la campaña de la fórmula Filmus-Tomada.

Nosotros consideramos que inicialmente había una búsqueda en la estrategia del Frente para la Victoria de ampliar la base de sustentación de la propuesta electoral y de nutrirla de diversidad desde distintas expresiones políticas, sociales y culturales que provenían de fuerzas diferentes del campo nacional, popular y progresista. Esa búsqueda de diversidad se cristalizó de algún modo en las colectoras de Ibarra por un lado y de Nuevo Encuentro por el otro. Sin embargo, creemos que esa búsqueda no tuvo un correlato adecuado en la estrategia general de la campaña porque no puso en escena esa diversidad de apoyos. Esto generó una campaña monocolor y endogámica que llevo a la obtención de un resultado, que si bien es mejor que los últimos desempeños del Frente para la Victoria en la Ciudad, indiscutiblemente nos pone a una distancia muy grande de la performance de Mauricio Macri.
Va a ser muy dura la pelea en el balotaje.

Creemos por otra parte que el resultado de Nuevo Encuentro fue muy importante, porque siendo la primera vez que se presentaba en el distrito, obtuvo 115.000 votos que representa casi el 7% del electorado de la Ciudad de Buenos Aires. Este número cobra aún mayor importancia si se tiene en cuenta la performance de partidos tradicionales como la UCR, que sólo obtuvo el 2%. Además, nuestros resultados no sólo representaron un aporte al caudal de sufragios a la fórmula Filmus-Tomada sino que además permitieron renovar las dos bancas puestas en juego.

Nuevo Encuentro mostró una enorme voluntad política y un despliegue militante que se evidenció en la organización tanto de la campaña como de la fiscalización, cuestión que fue reconocida por distintas fuerzas políticas de la ciudad. Esto merece una felicitación colectiva para el conjunto de nuestra fuerza política y para el conjunto de los sectores de Nuevo Encuentro. Además, hemos cuidado cada uno de los votos obtenidos. Los compañeros que estuvieron a cargo del equipo de fiscalización confirmaron que tenemos en nuestro poder casi el 98% de todas las planillas de las mesas de la elección del domingo pasado, o sea, casi la totalidad de las 6000 planillas. Eso habla de la calidad de la fiscalización, y del compromiso de la militancia de Nuevo Encuentro a la hora de emprender una tarea como ésta. El resultado pone de relieve que cumplimos con la tarea de aportar a la cosecha general de la fórmula de jefe y vicejefe, y por otro lado de mostrar una fuerte presencia política en la Ciudad.

Por un lado, sentimos lo amargo de la derrota electoral, pero por otro, estamos contentos con el desempeño de Nuevo Encuentro, pues gracias al esfuerzo militante y al despliegue territorial, hemos obtenido un resultado que nos permite mantener un bloque de 3 legisladores: Gabriela Cerruti, Edgardo Form y Delia Bissutti y también vamos a ser parte del debate en las comunas con María Suárez electa por la Comuna 3, Juan Carlos Funes en la Comuna 13 y Mónica Menghini en la Comuna 8. Por lo tanto, en términos institucionales, Nuevo Encuentro amplía su representación institucional en la Ciudad. Este es un dato que merece la alegría de los compañeros y compañeras que integramos esta fuerza política.

Queda pendiente en estos días poner el cuerpo como hicimos en la primera vuelta para el balotaje y tener absolutamente clara nuestra firme predisposición, nuestra firme voluntad de hacer todo lo posible para tratar de revertir el resultado del domingo último y que el balotaje nos encuentre construyendo una nueva mayoría en Buenos Aires.

Hoy hay tendencias y voces que tratan de plantear que hay que bajarse del balotaje, que hay que renunciar a esa pelea. Nosotros estamos convencidos de que serán 20 días de mucha discusión, de mucha militancia y de que más allá de lo difícil que sea la cuesta y de lo empinado que sea este camino o las pocas perspectivas que algunos puedan visualizar en el resultado del balotaje, hay que hacer el máximo esfuerzo. Es todo un desafío. Y tenemos que combinar nuestra militancia en la Ciudad para el balotaje con la pelea en la Provincia de Buenos Aires, que es central para Nuevo Encuentro. Queda un mes de campaña de cara a las primarias del 14 de agosto para que Martín Sabbatella y nuestra propuesta en la provincia tengan la mayor cantidad de votos posibles. Así que tenemos pocos días por delante para trabajar con el objetivo de hacer las mejores elecciones posibles en la Ciudad de Buenos Aires y en la Provincia.
Ahora más que nunca a poner el cuerpo.